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Ricardo Abumohor en el 57º Aniversario de O'Higgins: “Estamos creando una gran institución”
Publicado Lunes, 09 de Marzo de 2012
Ricardo Abumohor Salman llega raudo a su oficina, saluda con cordialidad, se sienta en su escritorio y medita un par de minutos para ordenar sus ideas, luego comienza a relatar por qué llegó al club O’Higgins, una institución que siempre estuvo cercana a su familia y a su infancia que vivió en el campo de la antigua Rancagua, un lugar que admira, pues para él es “ciudad histórica que de una u otra forma ha pasado por altos y bajos, es una ciudad pujante, esforzada y sacrificada que ha conocido sobre éxitos y derrotas”, dice mientras observa por la ventana.
Rancagua “es una ciudad con hambre, con deseos de éxitos, de triunfos de tener una institución sólida”, dice refiriéndose a la fiel hinchada celeste a quienes saluda por estos 57 años de vida: “Felicitar a toda la gente de O’Higgins, a la hinchada de Rancagua, a todos lo que de una u otra forma vibran con su club, con su institución, la que debe ser mirada con orgullo y satisfacción”.
Para Ricardo Abumohor, ellos son lo más importante del club, pues está convencido que sin hinchada no hay institución, de ahí que entiende el pesar que arrastran los seguidores del Capo de Provincia, pues “el fútbol es emocional y pasional por excelencia, tendremos otros defectos, porque de repente somos muy dados sólo al éxito, de repente nos cuesta creer en las personas por las historias vividas. Han vivido tantas situaciones en las que han sido defraudados y han tenido pocos momentos gratos y muchas desilusiones”, sin duda un aliciente para llegar a la capital de la región de O’Higgins, la que se convirtió en prioridad para la familia que logró devolver el rol de protagonista a la Tienda Celeste.
PACIENCIA Y CONFIANZA
Fue un 26 de agosto de 2005 cuando la familia Abumohor se hizo responsable del club O’Higgins de Rancagua con una misión muy importante, desarrollar la institución desde los cimientos, “porque no puedes construir edificios sobre pantanos”, reflexiona el ex timonel de la ANFP.
Hoy, cuando el club cumple 57 años, el Presidente de O’Higgins pide paciencia y confianza a su hinchada, porque “cuando uno hace las cosas a consciencia uno siente tranquilidad… La inquietud a veces viene cuando tú has hecho esfuerzos, has trabajado con honestidad, con un objetivo y de repente los resultados no se dan y vienen las inquietudes, la impaciencia… Jorge Sampaoli, quien es un gran técnico se fue porque no hubo paciencia”, recalca.
Para la máxima autoridad de O’Higgins, “el amor a la fuerza no existe, esto no es de una persona, es de un conjunto de cosas, porque cuando ese conjunto de cosas: ciudad, directiva, autoridades, cuerpo técnico, socios, luchan por un objetivo es más fácil (…) Yo creo que existen auras positivas y negativas, entonces cuando hay auras positivas y hay un deseo y en la derrota lloramos todos y el éxito lo disfrutamos todos es mejor, porque cuando nos cuestionamos o descalificamos unos a otros es más complicado”, finaliza el timonel celeste.
LOS CIMIENTOS DEL CAPO
El Directorio del Capo de Provincia arribó el 25 de agosto de 2005 a Rancagua, en estos años no sólo logró sanear las deudas del complejo deportivo La Gamboína, sino que generó las instalaciones necesarias para el desarrollo integral tanto del fútbol profesional como de las series inferiores del Capo de Provincia. “Aquí hay una familia que tiene una trayectoria deportiva desde mi papá (Nicolás Abumohor) y que entendemos la diferencia que existe entre ser empresario y ser dirigente”, dice don Ricardo.
Hoy el proyecto es aún más ambicioso, pues O’Higgins adquirió un nuevo complejo deportivo. “Monasterio Celeste” es un campo de 14 hectáreas emplazado en Requínoa, que contempla la construcción de dos canchas de pasto natural para el Primer Equipo, cinco canchas para cadetes y Escuela de Fútbol, una cancha de pasto sintético, el hotel de concentración del Plantel de Honor y las instalaciones necesarias que convertirán a este proyecto en el complejo deportivo más moderno y avanzado de Sudamérica.
“Hubiésemos querido que las cosas sucedieran antes, pero todas las cosas van teniendo un timing y una etapa, a veces tu puedes tener un éxito esporádico o hacer un esfuerzo para tener un éxito esporádico, pero qué pasa después”, reflexiona Abumohor.
“Yo puedo entender el escepticismo del hincha porque ha tenido tantas frustraciones que tiene derecho a pensar así, pero nosotros les vamos a demostrar, a partir de los esfuerzos que se están haciendo, que estamos creando una gran institución, porque O’Higgins puede llegar a ser una gran institución y para eso necesitamos tener un poquito más de paciencia y aprender a creer en las personas que son válidas”, finaliza.
